Por abuso de autoridad y tráfico de influencias vecinos de Tepalcapa denuncian a inspectores de Desarrollo Urbano de Cuautitlán Izcalli

Por: González Calderoni

Cuautitlán Izcalli, Méx.- Por actos y omisiones constitutivos de delito por el ejercicio indebido de atribuciones, usurpación de funciones, tráfico de influencias y falsificación de documentos gubernamentales y lo que resulte, fue denunciado de nueva cuenta el inspector de la Dirección de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Cesar Augusto Perea Reyes, y  presumiblemente también a su cómplice de fechorías Osvaldo Solís y un tal Francisco N.

Es de mencionar que esta nueva carpeta de investigación (próxima semana daremos a conocer su número) iniciada por José Carmen Zambrano Zamora, en la Subprocuraduría con residencia en Cuautitlán Izcalli viene a reforzar la averiguación previa CUA/IZC/II/1686/2011, con numero económico 945/2011, llevada en la primera mesa de trámite.

De la nueva denuncia por despojo y de la cual el alcalde de Izcalli, Carlos Saldívar, como el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas; representantes de la delegación de los derechos humanos con residencia en Tlalnepantla, sindico y regidores de Cuautitlán Izcalli, tienen una copia fiel de la denuncia que fuera presentada por parte del señor Zambrano Zamora, quien refiere que Cesar Augusto Perea Reyes en complicidad con Martín Pérez Portugal, su esposa Gloria Ofelia Díaz Reyes (presunta prima de Cesar Perea Reyes), así como de Pedro Pérez Portugal y Araceli Lima Morales, falsificando documentación oficial y reviviendo al difunto Roberto Pérez García, pretenden apoderarse de una franja del terreno de la calle Adolfo López Mateos de la comunidad conocido como el pueblo de Tepalcapa en Cuautitlán Izcalli.

Además de que serán las autoridades judiciales del estado las que determinen la situación jurídica de los posibles fraccionadores clandestinos encabezados por el servidos público Cesar Perea, Osvaldo Solís y un tal Francisco N., vecinos de Tepalcapa pedirán la separación de los deleznables funcionarios izcallenses, para que desde la vida civil enfrenten la acción de la justicia y sean debidamente resguardados en algún penal mexiquense, para de esta manera evitar más ofensas contra personas de bien, pero sobre todo mexiquenses.